En el último Pleno municipal se aprobó una modificación de créditos por importe de 18.000 euros para poder acometer esta restauración, cuya mayor dificultar será la aportación de piezas de repuesto, debido a su antigüedad, por lo que dichos trabajos se encargarán a la propia empresa automovilística ya que, como dijo el alcalde, son "piezas originales y muy antiguas, por lo que ninguna otra empresa lo podría hacer". Entre otras características el vehículo es descubierto y cuenta con una escala superior; lleva un depósito de gasolina de 60 litros, dispone de cuatro frenos, pesa 1.800 kilos y puede transportar otros 2.000 kilos de agua y material. Como anécdota Guarido dijo que para su adquisición pagaron en el año 1.930 a Alemania unos derechos arancelarios en oro de 2.175 pesetas.
El propósito del Ayuntamiento es que el vehículo pueda estar de nuevo en funcionamiento como coche histórico para poder utilizarlo en desfiles y otros actos que se celebren en la ciudad, así como el elemento más destacado en las visitas infantiles al parque de Bomberos y posteriormente de la exposición permanente que se instalará en el futuro Parque.